Cook & Chef Bienestar

Una alimentación basada en vegetales, la clave para cuidar la piel, también desde dentro

Jueves, 29 Junio, 2023

Frutos secos como las almendras, frutas y verduras de colores vivos y el té verde o el café son los aliados perfectos contra las agresiones solares, especialmente en verano

Desde hace años somos ya conscientes del daño que puede provocar en nuestra piel una exposición prolongada a los rayos ultravioleta. La piel es el órgano que nos protege de muchos factores externos y es necesario resguardarla debidamente: aplicarnos protector solar durante todo el año, llevar sombreros, gafas de sol...

Mimar nuestra piel puede ayudarnos a retrasar el envejecimiento natural, pero, ¿sabías que es igual de importante cuidarla tanto por fuera como por dentro? Es momento de prestar atención a la alimentación.

Prevenir los efectos negativos del sol

Según explica un artículo publicado recientemente por la revista científica ‘Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics’, una dieta basada en alimentos de origen vegetal es fundamental para nutrir nuestra piel. Esta investigación ha correlacionado el consumo de verduras, frutas y legumbres con un menor daño en la piel tras estar expuesta al sol.

Tal y como da cuenta esta prestigiosa publicación, los alimentos de origen vegetal son ricos en polifenoles, carotenoides y vitaminas, elementos que ayudan a la defensa antioxidante de la piel y evitan el envejecimiento prematuro. Su consumo, dentro de una dieta equilibrada, contribuye a prevenir, mitigar y reparar los efectos negativos del sol.

Qué comer para tratar la piel como se merece y prepararla para la llegada del calor:

Frutas y vegetales a todo color

Los tomates, las sandías, las papayas… Contienen licopeno, un pigmento orgánico de color rojo con propiedades antioxidantes. Además de proteger contra la agresión de radicales libres, reducen la incidencia del cáncer de pulmón y próstata y previenen la degeneración macular.

Asimismo, los vegetales de color naranja tienen una doble función: protegen del sol y reparan la piel. La calabaza, el melocotón, la zanahoria, el mango… Estimulan la creación de melanina, el componente responsable de la coloración de la piel.

Las verduras de hoja verde como la acelga, las espinacas y el brócoli también son beneficiosas para la piel, al mismo tiempo que aportan fibra y favorecen la eliminación de toxinas.

Vitamina C

La vitamina C es parte esencial de muchos productos de cosmética gracias a su capacidad de iluminar el rostro y de disminuir las manchas. Pese a que la fama la llevan los cítricos, también el brócoli, la coliflor, los pimientos o el kiwi son algunos de los alimentos con más vitamina C para alimentar la piel con esta fuente de salud.

Frutos secos y legumbres

Ambos proporcionan nutrientes que no se encuentran en alimentos de origen animal. Es especialmente efectivo el consumo de almendras, cuya ingesta se ha relacionado con una reducción de la intensidad de la pigmentación facial. Y también la soja, sobre todo en mujeres que ya han pasado la menopausia.

Café, té y cacao

Estas tres bebidas contienen polifenoles, que aportan elasticidad a la piel. Una buena noticia: con las versiones “descafeinadas” del café y del té se obtienen los mismos resultados. Los granos de café molidos son también un excelente exfoliante, ya que actúan como antiinflamatorio y estimulan la circulación sanguínea.

Y también… Pescados 

Los pescados ricos en Omega 3 como el salmón, el pez espada, las anchoas y las sardinas ayudan a prevenir el cáncer de piel.

Además, son fuente de Vitamina D, conocida como la “vitamina del sol”, que tiene como función absorber el calcio y el fósforo.

¿Qué alimentos evitar?

Los productos ultraprocesados, con exceso de sal, aditivos y las harinas refinadas favorecen la agresión de los radicales libres, inflamando y dañando la piel y no aportando nutrientes necesarios para mantenerla hidratada y protegida. Se recomienda eliminarlos de las rutinas de alimentación y comerlos de forma extraordinaria.